Sé que para que mi equipo levante la copa tenemos la probabilidad de siempre, la que con tantos años de espera nos toca, porque mientras más minutos, torneos, luguillas y finales pasen, más cerca estamos de que suceda, y sospecho que en esta opción el futbol no cuenta mucho.
La otra probabilidad de siempre es triste, se trata de que mi equipo desaparezca, tal vez no ante el primer rival, tampoco en la semifinal, sino en la final para que duela más. Ya todos conocemos a mi equipo, y yo recuerdo claramente cuatro finales en las que mi corazón terminó terriblemente roto, contra Necaxa, ante Pachuca, Santos y la peor y última con Toluca, justo cuando los cementeros olvidan que hay que ganar o simplemente la mala suerte no nos acompaña, y pasa lo de siempre, perdemos.
Lógicamente espero que nos ayude la primera y ya de paso si le echan ganitas no estaría mal, lo importante es que mi equipo sea campeón, que entienda que hay que ganar desde la ida, que no importa el rival, que el exceso de confianza no aplica, que pasarán a la historia, por lo menos en mi corazón, y que ya es justo. Juro que no me importará si tengo que festejar con la pared, no me importará si estoy sola en esto, en serio lo voy a disfrutar.
¡Vamos Cruz Azul!
2 comentarios:
Nos veremos en la final mi amor, y me temo que será muy complicado ese momento, porque no quiero que sufras más por tu equipo y porque yo tampoco quiero sufrir con el mío. Ojalá que nos encontremos en la disputa por el título, y a ver cómo le hacemos pa'no sufrir.
Besos.
Ya les toca, confía.
Tqm.
Chesquito/Irenis.
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