viernes, 1 de octubre de 2010

09449

Si hay algo que debo admitir para hacer públicas estas fotografías es que soy una naca. Sé que no se ve tan mal andar detrás de personajes famosos para tomarse una foto con ellos o conseguir un autógrafo, para que conste que se estuvo cerca de ellos y poder presumir, pero yo tenía que ir más allá, al nivel no aceptado en la persecución de estos seres.


Primero fue Carlos Hermosillo, al que encontré en el pasado Abierto Mexicano de Tenis, justo cuando el desfile de modas había comenzado, el lugar estaba lleno porque se jugaban las finales y era el momento de farolear en tan nice evento deportivo. Ah, por qué yo no habría de naquear rodeada de la gente bien.


Lo malo fue cuando no pude resistirme y terminé acosando al pobre Finito López en una fiesta de gente que no conocía. Eran las bodas de oro de unos familiares del papá de Sergio, o sea, ¿así o más desconocidos?


Nunca los había visto, no recordaba ni sus nombres un minuto después de estrechar sus manos, pero claro que me dio emoción enterarme de que el ex boxeador estaría ahí, me ilusionaba verlo y según yo tenía clarísimo que debía respetar su espacio y nomás saludarlo, ni pensaba acosarlo con preguntas tontas.

Ah, pues a media fiesta ya quería una foto, poco me importó ver al pobre hombre sin poder comer, beber, platicar con su esposa, dejar de sonreír para las múltiples fotos, simplemente sin disfrutar la fiesta, yo conseguí al fotógrafo y aunque tardé en decidirme a pedírsela, saqué a relucir mi código postal.

¡Lo bueno es que no me arrepiento y ya puedo presumirla!

1 comentario:

Sergio dijo...

No pasa nada mi vida, recuerda que el Chnafle se ha tomado fotos con peores personajes, jajaja.

Besos.